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El campo no es moneda de cambio

Luis Rogelio Rodríguez-Comendador Pérez
Alcalde de Almería

En un momento clave para el futuro del campo almeriense, cuando el Parlamento Europeo debate una modificación acerca del incremento del cupo de importaciones desde Marruecos, el sector necesita una política más realista, más efectiva y más implicada en la defensa directa de sus intereses. En definitiva, el campo almeriense necesita del Gobierno de Zapatero más hechos y menos palabras. Por eso, y para mostrar el apoyo unánime del Partido Popular al sector productivo agroalimentario, representantes del PP de los municipios pertenecientes a la provincia de Almería y al valle del Guadalentín en Murcia se han reunido en Lorca para lanzar un claro mensaje de apoyo y firmeza en defensa de la economía de miles de familias almerienses.

Desde el Partido Popular pensamos que el acuerdo con Marruecos perjudica gravemente los intereses de España, y especialmente a los agricultores del Poniente y del Valle del Guadalentín. Nuestro rechazo a este acuerdo ya está sobre la mesa de las autoridades europeas se fundamenta en que los términos contemplados en dicho documento se traducen, en término reales, en una apertura progresiva del mercado europeo para los productores marroquíes. El acuerdo contempla, según se ha anticipado ya de forma oficial, un incremento de las concesiones sin considerar las consecuencias tan negativas que va a tener sobre el sector español, ni su deficiente aplicación porque no se ha respetado el precio de entrada preferencial, ni se ha adoptado ninguna medida para evitar las graves perturbaciones de los mercados. En el marco de estos acuerdos, la coincidencia de los calendarios de producción con España, y la cercanía de estos países terceros mediterráneos al mercado comunitario están provocando grandes daños al sector del tomate español, y un “efecto dominó” sobre otros cultivos estratégicos, como el pimiento, el calabacín, la sandía, la fruta de hueso, la uva de mesa, los cítricos, el melón y la fresa, entre otros.

Los agricultores almerienses han realizado actuaciones para la modernización del sector productor del tomate que han repercutido en la mejora fitosanitaria del cultivo, en la reducción de los costes de producción y en la mejora de la calidad y de los rendimientos obtenidos. Sin embargo, este esfuerzo no será eficaz si se aumentan las concesiones a Marruecos en un momento en el que se están estableciendo en este país grandes explotaciones. Por ello, es necesario que las autoridades comunitarias tengan en cuenta nuestras justas demandas con objeto de evitar mayores perjuicios a los productores almerienses de frutas y hortalizas y, en especial, de tomate.

Lamentablemente, el señor Zapatero vuelve a utilizar al campo almeriense como moneda de cambio para satisfacer los intereses de Marruecos. Las más recientes declaraciones llevadas a cabo por parte de los responsables políticos del Gobierno de la Nación, en especial las de la actual Ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, vuelven a poner de manifiesto el nulo esfuerzo que están desempeñando por defender los intereses de nuestra agricultura. Estos hechos nos parecen irresponsables e incomprensibles, puesto que, al margen del daño que se inflinge a los productores, se está entregando a Marruecos la tarea de llenar nuestra despensa, con la consecuente incidencia hacia los consumidores españoles y europeos. Una nueva irresponsabilidad del señor Zapatero que acabaremos pagando entre todos.

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