Edita: Fidio (Foro Indalo de Debate, Ideas y Opinión / Twitter: @opinionalmeria / Mail: laopiniondealmeria@gmail.com

Excusas impresentables

Antonio Felipe Rubio
Periodista

Unos de los primeros argumentos que se han esgrimido para dar comienzo a la precampaña en clave municipal se refieren al tristemente famoso Plan E.

Como bien se sabe el Plan E ha sido un auténtico fiasco en cuanto a la relación de proporcionalidad entre dinero invertido –mejor dicho dinero gastado- y rendimiento obtenido. Este plan ha sido duramente criticado desde el entorno comunitario de la Unión al no haber conseguido, ni de lejos, los mínimos requerimientos de eficacia que otros países europeos se han impuesto para reactivar el crecimiento y paliar la crisis.

El Plan E, una vez conocido su estrepitoso fracaso, trata de buscar complicidades en ayuntamientos gobernados por el PP. Incluso, se habla de una perversa estrategia premeditada por la derecha para evitar dar ocupación a los parados y así fastidiar al Gobierno de Zapatero. Cree el ladrón que los demás son de su misma condición.

Para conseguir una rebaja en las listas del paro, de un día para otro, no hay que ser tan alambicado. Esto ya está inventado; baste comprobar la facilidad para alimentar las listas de “oferentes” de empleo, cursos de formación… que jalonan la legión de “trabajadores por España”: ocurrente definición de ZP para un parado inserto en cursos de reciclaje.

Las nuevas hornadas de ideas recién excretadas por el ex ministro del Tippex, Caldera, pretenden, de un plumazo, eliminar de las listas del paro a cientos de miles de desempleados por el mismo procedimiento que ya se han camuflado a los 497.000 que no figuran en las listas del INEM. La idea es disuadir a los críticos del entorno europeo de que el Gobierno de España es el campeón del paro en el continente y un desastre en medidas paliativas de la crisis, como ha demostrado el Plan E.

Ya no tiene objeto recordar que el dinero empleado en conseguir las mejores aceras y bordillos de Europa se podría haber empleado en sanear las cuentas deudoras de los ayuntamientos. Ahora es el momento de reconocer (miren la situación de Gallardón) que el dinero del Plan E hubiese tenido un óptimo fin destinándolo a pagar a los proveedores de los ayuntamientos; así no se daría lugar a la ruina de pequeñas y medianas empresas que no han podido soportar la mora y fallidos de las instituciones deudoras. Ya es tarde. No hay dinero ni para las nóminas de los funcionarios; cuanto menos para pagar las facturas pendientes, lo que arrastra un sinfín de catástrofes.

Afortunadamente este no es el caso del Ayuntamiento de Almería, uno de los más saneados de España, lo que no impide la permanente imprecación del PSOE hacia el desastre insistiendo en sacar a paseo los dineros reservados a plazo fijo en cuentas bancarias. O sea, la eterna historia de la cigarra y la progresista hormiga alegre.

Ya hay que tener desparpajo para asirse al Plan E como argumento de acusación a la oposición. Ahora bien, identificar a un ayuntamiento como la “Bruja Avería” es un intento de estéril complicidad en el desastre. Recuerden que todos los proyectos del Plan E tenían que quedar al margen de las inversiones municipales ya previstas por los ayuntamientos. Tenían que presentarse en plazo récord ante el Gobierno y, era sólo el Gobierno, quien aprobaba los proyectos presentados a los que se exigía presupuesto económico, puestos de trabajo, memoria de materiales, plazo de ejecución… y todos los requisitos que, insisto, sólo el Gobierno tenía la potestad de fiscalizar y aprobar.

Por tanto, quienes observaren alguna irregularidad en el desarrollo práctico de los proyectos del Plan E ya están tardando en presentar una denuncia ante la Subdelegación del Gobierno. Pero, según parece, o no se tiene constancia fehaciente de tales irregularidades o se prefiere lanzar libelos ante la opinión pública; y todo, en la imprudencia de arrojar piedras sobre su propio tejado. Si alguien hizo algo mal, lo hizo bajo la observancia de las estrictas normas del Gobierno, incluyendo las generosas dimensiones de los carteles publicitarios.
(Publicado en noticiasdealmeria.com) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario