Edita: Fidio (Foro Indalo de Debate, Ideas y Opinión / Twitter: @opinionalmeria / Mail: laopiniondealmeria@gmail.com

Cuarentena de artistas


Moisés S. Palmero Aranda
Educador ambiental y escritor

⏩⏩⏩ El arte se ha convertido en uno de los refugios para sobrellevar la cuarentena. En los momentos de crisis es cuando se empiezan a apreciar las cosas que tienen verdadero valor. En la sociedad materialista, capitalista, que vivimos el arte se ha considerado como un entretenimiento, y cuando hay que ajustar los balances, es en lo primero que se suele recortar, como si pudiésemos vivir sin él.


Son muchas las carencias que tiene nuestro sistema educativo, pero una de las principales es la de no ponderar el arte por encima de otras materias. Es cierto que en los primero niveles se le da mucho valor, pero a medida que vamos creciendo lo van eliminando de la programación, por considerar que nada aporta a la formación curricular del alumnado. Así que terminamos nuestra formación con un montón de títulos, sin preparación para el mercado laboral y sin saber comunicar lo que pensamos y expresar nuestros sentimientos.
El baile, la pintura, la escritura, las manualidades y los videos nos están ayudando a pensar, estimulando la imaginación, la creatividad y la comunicación
Hoy, en nuestro encierro forzado, recurrimos a la literatura, al cine y a la música para entretenernos tal como nos enseñaron, pero también lo estamos utilizando como terapia, para curar, relajarnos y sobrellevar nuestros peores temores, la incertidumbre, la ansiedad, el estrés y toda la tensión acumulada. El baile, la pintura, la escritura, las manualidades y los videos nos están ayudando a pensar, estimulando la imaginación, la creatividad y la comunicación. Sin ser conscientes de ello estamos reforzando nuestra autoestima, haciéndonos crecer personalmente. Cuando nos hemos parado y ha desaparecido todo lo superfluo, lo prescindible, lo que nos roba tiempo para enriquecer a unos pocos, hemos sacado ese artista que nos obligaron a esconder en lo más profundo de nuestro ser porque no sería productivo.

Los artistas siempre se han considerado unos excéntricos, ciudadanos que pierden el tiempo escribiendo, tocando música, esculpiendo, mientras podían estar trabajando. Tanto es así que si tenías una inquietud artística te recomendaban que primero te buscases un empleo digno y dejases esas cualidades como hobby.

Gracias a todos esos artistas hemos podido reconstruir parte de la historia de la humanidad. Piensen en las pinturas rupestres, en las obras clásicas de la literatura, en las catedrales, en el Renacimiento y los grandes pintores contemporáneos que se adelantaron a su tiempo… Qué habría llegado hasta nosotros.
Quizás este verano en las fiestas populares bailemos el baile del coronavirus, vistamos con camisetas de yo sobreviví al virus o nos tomemos una tapita de coronavirus con tomate
Estoy seguro que de esta inusual experiencia que nos ha tocado vivir saldrán muchos poemas, novelas, películas, cuadros y canciones para la posteridad. Historias de héroes y villanos anónimos, de conspiraciones políticas, de humor, de amor, ensayos filosóficos. Habrá tragedias, comedias y grandes leyendas épicas de sacrificio, de solidaridad, de compromiso. Quizás este verano en las fiestas populares bailemos el baile del coronavirus, vistamos con camisetas de yo sobreviví al virus o nos tomemos una tapita de coronavirus con tomate.

El arte nos hace mejores personas, más sensibles, más humanos, más críticos, más sabios y, como dijo Séneca el Joven, la sabiduría puede hacernos libres. Quizás paradójicamente este encierro temporal sirva para liberarnos de las cadenas de un modelo que teme a los artistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario