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Gorrillas

Víctor Mengual Arrufat

En la playa han hecho un paseo marítimo muy bonito y se aparca en batería en ambos lados. El hecho es que debe ser muy rentable el negocio, pues cada 10 metros hay un inmigrante haciendo las veces de aparcacoches y cobrando el “impuesto del miedo”. Su negocio se basa en intimidar a los conductores. Cada uno ejerce su poder de coacción en la parcela de su dominio.

Quiero que quede muy, muy claro que este no es un escrito racista ni muchísimo menos, sólo intento plasmar una realidad que, supongo, estamos sufriendo todos y en todas partes de España. Los gorrillas juegan con nuestro miedo. Presencié un caso vergonzoso cuando aparcaron dos chicas para disfrutar de la playa. En ese momento, el gorrilla “dueño” de esa parcela se les acercó y les pidió dinero con la mano extendida. Las chicas sacaron del bolso la única moneda que tenían, 50 céntimos. El gorrilla las miró y pensando que no era suficiente, con aspecto amenazador, dijo en un español malísimo: “No, No, ¡dame euro!. Si yo, no vigilar, puede pasar algo tu coche”.

Las chicas se quejaron. Tras percatarme de lo ocurrido, les dije que no cedieran. En un momento acudieron como moscas los gorrillas “colegas”, haciendo un corro a nuestro alrededor. Se respiraba amenaza. Cerraron más y más el corro. Casi nos tocaban. Ellas se atemorizaron y me dijeron que era mejor darle el euro y evitar problemas. Mientras una se esperaba en el coche, la otra fue a cambiar al chiringuito. No acudió ningún policía a rescatarnos, por lo que así quedó todo y lo trágico es que eso pasa miles de veces diarias en cualquier aparcamiento de cualquier ciudad española.

Alguien debería de tomar cartas en el asunto y erradicar esta nueva “profesión” de gorrilla extorsionador de españoles temerosos. ¿Dónde está la policía? ¿Dónde están las Leyes que nos deben proteger?. Nuestros hijos no pueden educarse en libertad si se ven coaccionados impunemente y ese es un flaco favor a nuestra Democracia. Buenos días a todos y paciencia con los gorrillas.
(La Voz de Almería)

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