José Fernández
Periodista
Impasible el ademán e inasequible al desaliento: así está
reaccionando el nuevo alcalde de Albox, Rogelio Mena (PSOE) al electrizante
episodio de la deuda municipal con Endesa que podría causar el corte de
suministro a las instalaciones municipales. Desconozco si ahora mismo las
dependencias del Ayuntamiento tienen luz o no, pero quien está incandescente es
el primer edil albojense, que, lejos del bochorno y la vergüenza que una
situación así provocaría a cualquiera, se ha venido arriba calificando de
“chantaje” la actitud de Endesa.
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| Rogelio Mena |
Es decir, que el señor Mena considera que las
empresas suministradoras de electricidad (y en vista de la situación de ruina
generalizada del Ayuntamiento, cualquier empresa proveedora) tienen la
obligación moral de aguantarle la morosidad continuada y no caer en la
provocación chulesca de solicitar el pago por los servicios
prestados.
Querer cobrar la luz… ¡habrase visto! Recordemos que el señor
Mena acaba de sustituir en el cargo al exalcalde socialista José García, con el
que, como concejal, colaboró en el prolongado y minucioso proceso de quebranto
municipal que ahora provoca tan penosas situaciones. Los de la oposición
denunciaban derroches y gastos innecesarios, pero ya se sabe que en los pueblos
se tiene muy mala leche.
Y es que lo único que cobra luz son las palabras del
señor García al presentar su dimisión, cuando aseguró “no sentirse ilusionado”
por el cargo. Ni ilusión, ni iluminación, aunque siempre habrá un iluminado
capaz de interpretar como ataque a la dignidad de un pueblo lo que no es más que
la consecuencia de una gestión económica tan calamitosa como
irresponsable.
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