El nombramiento del ya ex alcalde de Almería Ramón Fernández Pacheco como consejero de la Junta de Andalucía es la crónica de una huida anunciada. Estaba escrito que el PP y el que fue su candidato a la Alcaldía no tenían ninguna intención de dejarse la piel y trabajar enérgicamente por la ciudad de Almería, sino la de presentar a una persona que se sirviera de la plataforma que supone un Ayuntamiento de capital de provincia, que gestiona más de 200 millones de pre-supuesto, para continuar el camino hacia las alturas de la política regional y, seguramente en el futuro, nacional. Aunque ya nos lo anticipó su designación como portavoz del PP andaluz, la semana pasada llegó la constatación definitiva con la elección de Fernández Pacheco como consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta de Andalucía.
Nada que decir sobre el nombramiento de cualquier miembro del Partido Popular como consejero o consejera de la Junta de Andalucía. El PP ha ganado las elecciones autonómicas con mayoría absoluta y su presidente tiene toda la legitimidad para elegir a quien considere que mejor va a cumplir con las distintas responsabilidades competencia del Gobierno andaluz.
Lo que denunciamos y hemos denunciado todo este tiempo desde el PSOE es el uso de los recursos públicos de una institución como el Ayuntamiento de Almería por parte de Fernández Pacheco y su entorno para finalmente figurar en esos primeros puestos de salida hacia Sevilla, en lugar de destinarlos al cien por cien a solventar los graves problemas de la ciudad de Almería.
Fernández Pacheco se ha ido y ni siquiera hemos tenido la oportunidad de trasladarle lo que esperamos de él como consejero puesto que el ex alcalde no asistió al Pleno en el que se ratificó su renuncia. Tampoco invitó a la oposición a su acto de despedida como alcalde de todos los almerienses. Desde el Grupo Socialista queríamos aprovechar esa sesión plenaria para recordarle las tareas que la Junta de Andalucía y, concretamente, la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente tiene pendientes con nuestra ciudad. Ya que como alcalde no las ha reclamado, confiamos en que las afronte ahora como consejero.
La desecación de Las Salinas de Cabo de Gata, la joya de la corona de nuestro patrimonio medioambiental y nuestro más potente recurso turístico, es un asunto urgentísimo que debe abordar sin más dilación el nuevo consejero y sobre el que debe estar muy encima. Durante el tiempo que fue alcalde y con ese grave problema sobre la mesa no le escuchamos ni una palabra al respecto, lo cual no deja de ser inaudito.
Otro “debe” muy grave de Medio Ambiente con la ciudad de Almería es el Parque El Boticario. Dada su ausencia del Pleno, no tuvimos la oportunidad de preguntarle qué piensa hacer como consejero con ese espacio único que lleva años abandonado por la Junta de Andalucía, dejándolo morir.
Le sucederá María del Mar Vázquez, que ahora ejerce como alcaldesa en funciones. Desde el Grupo Socialista le deseamos suerte para los meses que quedan de Corporación, porque su suerte será positiva para todos los almerienses. Pero no debemos olvidar que María Vázquez ha sido la mano derecha del ex alcalde estos años, por lo que comparten la responsabilidad de la lista de incumplimientos del PP con la ciudad de Almería.
Fernández Pacheco deja la Alcaldía con una Almería que sigue sufriendo los mismos problemas de tráfico, de suciedad o de falta de mantenimiento de zonas verdes que cuando tomó el bastón de mando de la ciudad. Su huida ha confirmado que su compromiso con la ciudad no era real.
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