Rafael Leopoldo Aguilera
Director del IEA

El poeta árabe Annahelí protegido por Almotacín sintetizaba en estos breves versos el esplendor de nuestra ciudad en su tiempo: La ciudad de Almería es paraíso, /donde hallarse podrán/una por una todas cuantas cosas/puso en el suyo /Adán. Y otro panegírico del poeta Aben Aljatíb decía que Almería "era una ciudad saludable y provechosa, marítima y terrestre, noble y generosa, fortaleza de la elevación y el refugio, mina de la riqueza, esencia de la vida, y don de las armadas; nunca tarde para la victoria, ni embriagada con ella; residencia donde habita el bien; sustento de sus vecinos, y de larga e ilustre memoria". Dentro de unas horas comienza el año 2014 dedicado culturalmente al Milenio del Reino de Almería, momento de importancia para adentrarnos en un mayor conocimiento de nuestra identidad histórica a través de la implementación de actividades de diversa índole socio-culturales, que nos impregnen del esplendor de esa Almería en el siglo XI como reino de taifas, "…zafiro transparente con reflejos de esmeralda", así le cantaba Villaespesa.
Esta mirada de luces retrospectivas hacía el pasado milenario de Almería con un claro significado del presente y en el futuro más prometedor y esperanzador, para que piedra a piedra, y sin olvidarnos del agua, aunque sea con acequias y canales de riego, vuelva a ser emporio del comercio, base de la navegación, centro de la industria, refugio del saber, asilo de los expatriados, amparo de las artes, de las ciencias y de todo lo noble y egregio del ingenio humano.
No acabo de entender que se celebre el milenio de la Taifa de Almería en 2014, si según he visto siempre se fundó en el 1012 por Aftah.
ResponderEliminarEn 1014 fue cuando al cosa empezó a ir bien, con la llegada de Jayran, pero la fundación fue dos años antes.