Edita: Fidio (Foro Indalo de Debate, Ideas y Opinión / Twitter: @opinionalmeria / Mail: laopiniondealmeria@gmail.com

Lo incomible es la pasividad del gobierno de Sánchez

María del Mar Vázquez
Alcaldesa de Almería

Con un Gobierno más preocupado de lo que pasa en Waterloo que de lo que pasa en Francia, en el Partido Popular hemos dado un paso al frente para defender a los agricultores y a los transportistas almerienses, que están sufriendo una intolerable campaña de acoso y desprestigio en nuestro país vecino. Cada día, las empresas hortofrutícolas establecidas en Almería capital producen más de 3 millones de kilos de productos agroalimentarios de excelente calidad y con todas las garantías sanitarias. El 70% de esta producción va destinada a los mercados europeos y el no poder llevar nuestra mercancía a los puntos de destino comprometidos es un auténtico desastre para dos sectores claves para nuestra economía como la agricultura y el transporte. Y es que no podemos perder de vista que cada día 350 camiones almerienses parten de Almería con las mejores frutas y hortalizas para abastecer los supermercados de media Europa. Y como todas sus rutas atraviesan territorio francés, nuestros transportistas sufren retenciones kilométricas y daños en sus camiones y en la mercancía, mientras que el Gobierno de España mira hacia otro lado. Y el daño no es pequeño: los productores de Almería pierden 75 millones a la semana por los bloqueos al transporte en Francia, según ha precisado el gerente de la Coexphal, Luis Miguel Fernández.

Nuestros agricultores y transportistas están al límite por la pasividad y la tibieza de un Gobierno que no ha respondido con la contundencia debida las mentiras e infundios de algunos políticos franceses sobre nuestro campo. Y quiero ser muy clara en este sentido: que nadie se atreva a dudar de la profesionalidad de los agricultores almerienses. Las mujeres y los hombres que trabajan en la agricultura almeriense son un ejemplo de seriedad y de rigor en todo el mundo. Las empresas agroalimentarias establecidas en Almería producen con altísimos estándares de trazabilidad y seguridad alimentaria y en unas condiciones laborales y sociales que bien podrían copiar en otros países que sí ejercen en Europa esa competencia desleal que algunos desinformados pretenden achacar desde Francia al campo almeriense.

Y eso por no hablar de las solemnes ignorantes que dicen que nuestros tomates son incomibles. Los profesionales y empresarios almerienses del sector agrícola deben saber que en el PP van a encontrar la firmeza y la decisión que debería haber adopta[1]do desde el primer minuto un gobierno socialista ausente e indolente, y que está sobrepasado por la precaria situación política causada por las exigencias de sus socios independentistas. Por eso, nosotros sí que defenderemos a los agricultores y transportistas almerienses en donde haga falta, ante quien sea preciso y todas las veces que se necesite, porque no podemos dejar que se perjudiquen los intereses de un sector que en Almería ocupa directa o indirectamente a más de 15.000 familias.

Estaremos siempre del lado de nuestros agricultores, que merecen ser es[1]cuchados en sus demandas de aumentar los controles en la frontera con Marruecos para garantizar que los productos agrícolas importados cumplan con las normativas de la UE y evitar así una competencia desleal que pone en jaque la viabilidad de muchas explotaciones en Almería y el resto de Andalucía. No vamos a permitir que se deje caer un pilar estratégico de nuestra economía que es capaz dar de comer de un modo saludable y seguro a más de 500 millones de personas. Y es que lo único incomible aquí es la pasividad del gobierno de Sánchez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario