Iván Gómez
Jefe de Local de Diario de Almería
Mujeres, mojito, Mojácar se acaba. Fin de ciclo para un modelo turístico que 
no beneficia a la imagen y prestigio del municipio, la de paraíso natural del 
relax, tal y como lo entienden la alcaldesa Rosa María Cano y su equipo de 
gobierno del Partido Popular. La ordenanza contra el ruido, que ha tenido 
repercusión internacional por lo polémica y restrictiva, es la única solución 
que encuentra, junto a la que prohibe el botellón, para atajar un “desmadre” 
contra el que claman, según argumenta, “una mayoría silenciosa” de los vecinos 
de Mojácar. A pesar de las críticas recibidas en las últimas semanas, de las 
mofas por ciertos apartados de la normativa que no parecen serios, como el de 
vetar los dados y el dominó en terrazas, Rosa María Cano asegura que han 
iniciado un camino sin retorno. No hay marcha atrás. “Hemos llegado al límite, 
vamos a ser inflexibles”. No se arrepiente de nada porque entiende que del censo 
de casi 300 establecimientos del municipio (180 restaurantes, 3 discotecas, 19 
chiringuitos, 17 bares de copas y 51 cafeterías) “son sólo cuatro o cinco 
negocios los que sufrirán la ordenanza del ruido, los que traen la pellejería a 
Mojácar, los que ahora dicen que yo soy la ruina para el pueblo”.
Una vez superada la tensión de la sesión plenaria, en la que tuvo que 
expulsar incluso a algún vecino y soportar las duras críticas de la oposición, 
me explicó su visión con calma y detalle. Lo hizo el miércoles por la mañana. 
Durante más de una hora hablamos de una ordenanza que ha tenido repercusión 
hasta en la prensa británica y ante la que algunos alcaldes de su partido me han 
reconocido off the record que “se ha pasado un pelín”. Y lo hicimos sin 
saber que, días después, la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Mojácar 
organizaría una reunión informativa en el restaurante Marazul para abordar con 
un grupo de abogados de Almería y Granada un recurso contra la ordenanza 
reguladora del ruido procedente de usuarios de la vía pública, actividades 
domésticas y de vecinos. Dado el interés suscitado por mi análisis periodístico 
de algunas de las polémicas decisiones de Rosa María Cano en Tierra 
de Prohibiciones, con más de seiscientas visitas en un par de días y su 
reproducción íntegra en otros portales y medios digitales, reproduzco a 
continuación la entrevista íntegra publicada hoy domingo en Diario de Almería 
para que cada uno saque sus propias conclusiones sobre el futuro de Mojácar y el 
acierto/fracaso de las medidas de la alcaldesa.
- Todas nuestra normas y ordenanzas se hacen conforme a la ley y nunca pueden 
infringir leyes autonómicas que tienen un rango superior y mucho menos la 
Constitución Española. Cuando dicen estas tonterías contribuyen a manchar el 
nombre de Mojácar, parece que quieren vender al mundo que es una república 
bananera donde no se respetan los derechos de las personas. El 4 de abril iba a 
aprobarse en pleno, pero no lo hicimos pensando precisamente que se podía 
mejorar, que no estaba lo suficientemente madura, que había cuestiones que se 
podían matizar. Dimos la oportunidad a los grupos de la oposición de aportar sus 
propuestas para mejorarla y consensuarla y hablaban de una enmienda a la 
totalidad que nadie ha presentado. Jessica Simpson se sentó con nosotros a 
modificar la ordenanza y aún así votó en contra.
- ¿Quién redacta esta normativa y qué criterios se han tenido en 
cuenta? 
- La redacta, como todas las demás, una letrada del Ayuntamiento de Mojácar, 
no nos la inventamos y se basa en normativas y leyes de ámbito autonómico 
vinculadas al reglamento contra la contaminación acústica. De todos los 
apartados que se recogen a nosotros nos interesaba lo relativo a las viviendas, 
terrazas y veladores y al desarrollo de obras. Lo de los dados y el dominó se 
copió literalmente de la guía elaborada por la Consejería de Medio Ambiente. Es 
un copia y pega de un documento avalado por la Federación Andaluza de Municipios 
y Provincias (FAMP). Siendo un ayuntamiento del PP hemos cogido una normativa 
elaborada por un gobierno socialista y la oposición del PSOE en Mojácar es la 
que más nos critica.
-¿Y no cree que se han pasado con asuntos como el del 
dominó? 
- La oposición ha querido sacar de contexto lo de los dados y el dominó 
porque desde un primer momento han intentado politizar el asunto para favorecer 
los intereses de unos pocos empresarios. Hay cientos de municipios con 
ordenanzas similares, la de Ibiza, por ejemplo, es bastante más restrictiva para 
los establecimientos que la de Mojácar.
-Durante el pleno leyó quejas de los vecinos y turistas. ¿Cuántas se 
reciben cada año? 
- A lo largo de 2011 y 2012 hemos registrado 581 quejas, de las que 299 
corresponden al ruido en los locales y otras 282 al ruido procedente de las 
viviendas y urbanizaciones. Este malestar de los ciudadanos de Mojácar es el 
origen de una ordenanza necesaria para la convivencia en el pueblo. Hay una 
mayoría silenciosa que apoya la ordenanza y una vez aprobada hemos recibido 
muchísimas felicitaciones de vecinos y visitantes que nos habían llegado a decir 
que era la única forma de luchar contra el desprestigio de Mojácar y la fuga de 
turistas. No podemos olvidar que el ruido de la música de madrugada puede ser 
infernal y vulnera los derechos de las personas.
-¿Es la guerra contra el turismo de los jóvenes y sus 
fiestas? 
- Nos llega un tipo de turista que no queremos, recibimos a todo el mundo, 
pero el nivel de los visitantes ha bajado y hemos pasado de ser un paraíso 
natural a un lugar de fiestas descomunales de jóvenes que dejan dinero a cuatro 
bares y fomentan que se monten locales con cuatro palos, sin ninguna exigencia 
de calidad. No quiero Dj’s en los chiringuitos, no son discotecas, ni siquiera 
se permite la música ambiente pero nosotros estamos siendo flexibles. Hay 
locales bien diseñados y trabajados, establecimientos de calidad que dan un buen 
nombre a Mojácar y no tienen ninguna queja. Esos son el modelo a seguir para los 
demás. Y, sin embargo, hay otros locales que no tienen ni licencia de bar con 
música y otros que la tienen pero como se está mejor en la terraza pues le 
importa poco molestar a los vecinos. Esos son los que ahora dicen que por 
prohibir lo que está mal hecho soy la ruina del pueblo. Esos bares que nos están 
trayendo la pellejería. Queremos recuperar el turismo familiar y ahí también es 
importante que se mejore la oferta hotelera.
- Para cambiar el perfil del turista no basta con una ordenanza de 
ruidos, ¿qué más están haciendo para fomentar otro modelo? 
- Hemos aprobado la ordenanza de ruidos y la del botellón y hemos 
incrementado el control y vigilancia de los chiringuitos y establecimientos del 
municipio para que vuelva a ser un municipio donde te puedas tomar una copa 
tranquilamente. Sabemos que son unos pocos locales los que están contribuyendo 
al desmadre y no lo vamos a tolerar. He discutido mucho con los empresarios 
porque no han querido buscar soluciones y permiten que unos pocos se carguen 
Mojácar. Hay locales a los que ha ido la Policía Local 22 veces y ni caso. He 
pedido por favor, he rogado, me he reunido con todos los chiringuitos y ha sido 
imposible llegar a un acuerdo.
- Ha habido días en los que hemos levantado la playa con 20 agentes de la 
Policía Local y así lo haremos cada vez que sea necesario. Y vamos a ser 
inflexibles también con los establecimientos que superen el nivel de ruido 
permitido. Ya hemos tenido en Semana Santa un técnico con un sonómetro midiendo 
en los locales, pero a partir de ahora no es necesario porque en la ordenanza se 
le deja la potestad de decidir al agente, es innecesario un aparato porque 
creemos en la imparcialidad de nuestros policías. En el momento en el que los 
chiringuitos vuelvan a ser como antes van a bajar los problemas del ruido y el 
botellón.
- ¿No cree que le están pasando factura los años en los que se ha 
mirado para otro lado? 
- Es cierto que la situación está mal desde hace años y se ha tolerado en 
exceso, pero ahora es cuando hemos llegado al límite. La mayoría tienen licencia 
desde antes de que yo llegara a la Alcaldía, pero ha ido empeorando la 
situación. No nos interesa el turismo de un apartamento con seis jóvenes 
fiesteros. Ese estilo de ocio no lo quiero en Mojácar y ahí si vamos a ser 
inflexibles desde hoy. He sido una blanda porque tendríamos que haber cerrado ya 
algún establecimiento.
- Estos días lo ha pasado mal por la repercusión negativa para la 
imagen de su municipio. ¿Se ha arrepentido en algún momento de haber sacado 
adelante esta ordenanza? 
- Esto me está doliendo en el alma, esta imagen que se está proyectando de 
Mojácar. Como no pueden conmigo contribuyen a al desprestigio del municipio. No 
tengo ningún arrepentimiento, es lo que tengo que hacer por mis vecinos.
-¿Qué le ha parecido el rol que han jugado los empresarios y los 
partidos de la oposición? 
- Te pongo un ejemplo. Diego García, de Unión Mojaquera, ha presentado dos 
denuncias por ruido, una contra una vivienda y otra por un bar, y ahora vota en 
contra de la ordenanza. Han sido tan sumamente incendiarios y no han medido las 
consecuencias de la repercusión de sus ataques. La asociación de comerciantes 
está politizada y está claro que los cuatro que quieren seguir teniendo 
discotecas en sus terrazas se van a mostrar en contra. Son los que abren tres 
meses y se lo llevan calentito y los que hacen una competencia desleal a los 
demás establecimientos que aguantan estoicamente todo el año dando vida a 
Mojácar.
-¿Por qué no quiere que sirvan bebidas en las terrazas a los clientes 
que estén de pie? 
- Es la única forma que tenemos de evitar que determinados chiringuitos 
opten, como vienen haciendo en los últimos años, por quitar las mesas y sillas y 
acaben convirtiendo una terraza en una discoteca pero sin licencia. También 
impedimos que algunos negocios instalen planchas porque generan muchas molestias 
por el humo a los vecinos en bloques de edificios. El aforo interior de los 
bares y veladores se limitó en una primera ordenanza, pero después rectificamos 
porque no queremos perjudicar a la mayoría de los hosteleros de Mojácar

La ordenanza esta' muí bien y la alcaldesa tiene toda la razón par hacer esto...estamos con ella porque' se nota que esta limpiando la zona..
ResponderEliminares el fin de ese pueblo. los pub cerraran en poco tiempo. y sera un pueblo al que solo vayan los que vivan alli.. y poco mas..no van a recuperar el turismo que habia antes. y yo personalmente no iva antes tampoco, primero porque no me merece la pena el viaje para una sola marcha. y segundo por los controles que habia, asique no soy un asiduo a este pueblo que defiende a capa y espada el turismo festivo.
ResponderEliminary otro apunte. dice la alcaldesa que el dinero va para cuatro chiringuitos. de esos cuatro chiringuitos el ayuntamiento de almeria sacaba tajada. a todos se les va a cortar el pienso ahora...
en unos años veremos en tve ... " mojacar, el pueblo fantasma" y la gente que ahora aplaude que no se pueda ni jugar al domino en su casa por el ruido que hace, se preguntará.... por que??
La Plataforma MOJÁCAR SIN RUIDOS es una agrupación de vecinos/as defensores del derecho a la protección contra el ruido, las agresiones acústicas y los destrozos del entorno producidos en el pueblo mayoritariamente en temporada vacacional. No pertenecemos a ningún partido político pero sí creemos en el diálogo democrático que genera equilibrio y entendimiento entre los miembros de la sociedad desde una posición responsable. La Plataforma está abierta a la participación y colaboración de cualquier vecino/a o residente de Mojácar que quiera compartir, denunciar o buscar apoyo ante una problemática relacionada con el ruido y otras reivindicaciones que tengan como objetivo la defensa del derecho a la convivencia sin agresiones acústicas. Contacto: mojacarsinruidos@gmx.es
ResponderEliminarThe Platform MOJACAR WITHOUT NOISE is formed by a number of neighbours and residents who defend their right to be protected against acoustic aggressions of any type. We don't belong to any political party, instead, we believe in the democratic dialogue that generates the understanding and balance among the citizens from a responsible position. This platform is open to the participation of any neighbour or resident in Mojacar who wants to share, report or look for support in the fighting against the damaging effects of noise. Contact: mojacarsinruidos@gmx.es