Los roqueteros merecen otra cosa


Juan Fernando Ortega
Secretario General del PSOE en Roquetas de Mar y Candidato a la alcaldía.


Si yo pudiera decidir, haría las fiestas de la Virgen del Rosario de forma muy distinta. Muchos recuerdan cuando las organizaban José Antonio Sánchez “el Tolo” o María Ruiz la de las 200 viviendas, concejales socialistas de festejos. Eran buenas fiestas. Se celebraban en días festivos, cuando los niños no tenían colegio y cerraban los comercios, aunque el último día fuera el 12 de Octubre, y se festejaran juntas la Virgen del Rosario y la del Pilar. Eran buenas fiestas.

Se realizaban muchas actividades para los pequeños, para los jóvenes y los mayores (este año el Partido Popular ha eliminado hasta la comida de la tercera edad) y todos esperaban la fiesta con ilusión, la caseta popular se llenaba noche tras noche, con programación artística para todas las edades. Muchos recuerdan las actuaciones de Isabel Pantoja, Rocío Durcal, Medina Azahara, Juan Pardo, Danza Invisible, etc, de los años ochenta y noventa.

Ahora, hemos perdido la ilusión, el ferial es insuficiente, la programación no tiene atractivos, no existe la caseta popular y siendo mal pensados parece como si quisieran dejarlas morir, como han dejado morir el comercio tradicional del centro. Ya no son buenas fiestas. Y los ciudadanos de Roquetas se merecen otra cosa. Si yo pudiera decidir se harían las fiestas de otra manera.

Buscaría un recinto estable, programaría actividades para todos en fechas adecuadas, fomentaría la participación con festejos populares y, sobre todo, contaría con los jóvenes. Si yo pudiera decidir… 

1 comentario:

  1. Me averguenza ver como políticos como usted van a representar Roquetas de Mar (lo mismo, pero con distinto COLOR de collar). La gente habla en pasado y sin esperanzas de vivir, ¿de dónde se ha impuesto esta única actitud? El camino de Amat que todos soleis copiar. En Roquetas, se necesitan políticos que hablen con fuerza (lo contrario a no creer en nada) y sin miedo de ningún tipo expresen que son conscientes que Roquetas ya no es la de ANTES. Es una ciudad en todos sus sentidos, con la única excepción de sus políticos, que viven al filo de lo imposible. Le aconsejo, con todo el cariño del mundo, que deje la política, por usted y por la gente de Roquetas de Mar.

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