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Pepe González, un gallardero difusor del Quijote

Antonio Torres
Director de Canal Sur

El profesor  José González Molina (Los Gallardos, 1947) es un ejemplo para muchos vecinos de Los Gallardos porque representa lo que la voluntad y el esfuerzo pueden conseguir. Salió del pueblo, en los años sesenta, cuando una de las oportunidades más grandes era la de ir a trabajar a las minas de Bédar o buscar aíre en la emigración.

Pepe tiene un blog de literatura en Internet, Lecturas del Quijote, que va el primero en Google y ha recibido más de trescientas mil visitas de todo el mundo. Un dato esperanzador para un país que, con datos del CIS, solo 20 de cada 100 españoles aseguran haber leído el Quijote. Su blog  tiene por finalidad ayudar en la lectura del libro, para lo cual realiza un amplio resumen de cada capítulo y un comentario coral con las distintas interpretaciones del mismo.

El gallardero Pepe González, difusor del Quijote, con sus nietos

José González Molina es uno de los primeros vecinos de Los Gallardos que pudo acabar una carrera a finales de los años 60, un gran observador con la virtud impagable de escuchar. En aquella época en Los Gallardos casi todos los jóvenes estudiantes hacían Magisterio. Unos pocos pusieron la excepción al estudiar carreras técnicas en Cartagena, como el añorado Francisco Barón o  Juan Martínez Simón, que llegó a ser alcalde de Cartagena.

Eran tiempos de emigración, hambre y silencio donde los mayores veían pasar el tiempo jugando a las cartas. El papel de estraza, papel áspero, lo sostenía y lo envolvía todo. Pepe terminó los estudios de Magisterio en Almería a finales de los sesenta, se marchó a Valencia, donde empezó a ejercer de maestro y, trabajando y estudiando se licenció en Filosofía y Letras. Opositó a profesor Agregado de Instituto y ascendió a catedrático.

Cuando le pedimos una reflexión sobre el uso que se hace de la lengua en los medios de comunicación nos dice que su pensamiento sobre este tema está inspirado en lo que Cervantes manifiesta al respecto en el Quijote. Cuando en el capítulo seis de la primera parte el cura salva de la hoguera algunos libros de caballerías, "lo realiza porque están escritos con razones cortesanas y claras, que guardan y miran el decoro del que habla con mucha propiedad y entendimiento".

Señala el catedrático que quiere subrayar las expresiones "razonamiento claro" y "decoro", debiendo entenderse esto último  como un habla transparente y adecuada con la persona con la que hablamos  o para la que escribimos: en la novela, en el periódico o en otro medio. “Si situamos estas palabras de Cervantes en nuestra época, te diría que unas de nuestras principales fuentes de información -los periódicos y la televisión- se expresan en un idioma que, en general , adopta los consejos cervantinos. También es cierto que a veces se echa de menos una escritura reposada, objetiva y clara de lo que se manifiesta”.

Hijo de José el de Frasquitica, funcionario municipal,  y Paca la de José, Pepe retiene en la memoria imágenes de su niñez. Especialmente destacan las de los mineros que iban a trabajar a las minas de hierro de Bédar, regresando a sus casas con un aspecto fundido en blanco y negro; la falta de agua corriente en las casas, el esfuerzo que hacían las mujeres para lavar la ropa, yendo a los pilares. “El futuro estaba en las minas, en quedarse anclado o irse a trabajar a Francia, Alemania o Barcelona”.

Ha participado y presentando comunicaciones en diversos simposios y congresos nacionales e internacionales: Universidad de Oviedo sobre Clarín y La Regenta;  Menéndez Pelayo; Madrid, Valencia y Santiago de Compostela. Desde  2006 se dedica con asiduidad a un foro que llevan en la ciudad valenciana de Torrent, donde vive. Desde que se jubiló ocupa su tiempo en leer, escribir, llevar su blog y atender a sus nietos.